La directora insular de la directora insular de Recursos Humanos y Asesoría Jurídica, Lidia Pereira, ha indicado que desde el Cabildo se trata de “impulsar medidas de conciliación de la vida laboral, personal y familiar en esta época tan complicada para todos de crisis sanitaria, en la que padres, madres y tutores han asumido una mayor carga”

La Casa del Ganadero, en La Laguna, es el lugar en el que se está celebrando este mes de agosto el Campamento de conciliación vida laboral y familiar COVID-19 Verano 2020 destinado a los hijos e hijas, de entre 6 y 12 años, del personal del Cabildo de Tenerife. El objetivo que se ha propuesto la institución insular ha sido el de  “impulsar medidas de conciliación de la vida laboral, personal y familiar en esta época tan complicada para todos de crisis sanitaria, en la que padres, madres y tutores han asumido una mayor carga. A ello se suma la falta de actividades para los niños y niñas en estos meses, con lo que este campamento viene también a cubrir esa carencia”, ha indicado la directora insular de Recursos Humanos y Asesoría Jurídica, Lidia Pereira.

El campamento comenzó con 50 niños y niñas el pasado 27 de julio, y en las primeras semanas han llevado a cabo diversas actividades que han tenido como fin el fomento de valores que promuevan la convivencia respetuosa con el entorno y los hábitos de vida saludables. “Nos consta que están siendo unas semanas muy divertidas y de aprendizaje y convivencia para los chicos y chicas que están participando y con eso ya damos por cumplidos parte de los objetivos que nos hemos planteado con esta iniciativa”, afirmó Pereira.

En las próximas semanas, aprenderán mucho más sobre el mundo natural, el cuidado del entorno y la cultura popular canaria, así como juegos y costumbres tradicionales. Todo ello de una manera lúdica, a través de actividades de apoyo educativo, deportivas, manualidades, talleres, juegos y rincones creativos.

En este campamento también hay espacio para las salidas como al Bosque Encantado, a la Ruta de los Sentidos (Anaga), al Museo MUNA (Santa Cruz) y a la Playa de la Nea.

Todo el programa se desarrolla gracias al trabajo de un equipo de profesionales que coordinan y monitorizan a diario y velan por el bienestar de los niños y niñas participantes. “Esperamos que los niños y niñas sigan pasando un gran verano y que este campamento quede siempre en el recuerdo como una placentera experiencia”, concluyó la directora insular.