El Cabildo culmina la mejora paisajística entre Aldea Blanca y Las Zocas, en San Miguel
El vicepresidente primero y consejero insular de Carreteras, Enrique Arriaga, explica que “con estos trabajos se plantaron más de 1.200 ejemplares de flora canaria en el margen de la TF-65 y se trasladaron aquellas especies que no estaban adaptadas a las condiciones del espacio”
El Cabildo de Tenerife, a través del área de Carreteras, finaliza la mejora paisajística integral de la TF-56, en el tramo que va desde Aldea Blanca hasta Las Zocas, en San Miguel de Abona. Con esta actuación se ha logrado la recuperación ambiental y estética de la zona.
El vicepresidente primero y consejero insular de Carreteras, Enrique Arriaga, recuerda que “estos trabajos se enmarcan dentro de los servicios de conservación, mejora y limpieza de las zonas verdes, que buscan frenar el deterioro del espacio y mejorar su integración con el paisaje, de manera que sea más sostenible y requiera menos labores de mantenimiento, es decir, son inversiones que nos permitirán ahorrar recursos en el futuro”.
El consejero asegura que “con esta actuación se plantaron más de 1.200 ejemplares de flora canaria en el margen de la TF-65 y se trasladaron aquellas especies que no estaban adaptadas a las condiciones del espacio”. Además, destaca que “intervenimos en la superficie para restaurar su relieve y se llevó a cabo una importante labor de limpieza y restauración, sobre todo en los límites del barranco anexo a la explanada”.
El director insular de Carreteras, Tomás Félix García, explica que “se habían identificado varios problemas en este espacio como plantas en mal estado, especies invasoras, suciedad o deficiencias en los sistemas de riego” y detalla que “para ponerles solución se procedió a su mejora integral y a la instalación de un sistema de riego automatizado”.
Concretamente, se procedió al traslado de 48 ejemplares de laureles de indias sanos para ser trasplantados a espacios urbanos identificados por el Ayuntamiento de San Miguel, en Las Chafiras y Las Zocas. En sustitución de estos antiguos árboles, se llevó a cabo una nueva plantación con vegetación potencial de la zona como tarajales, acebuches, sabinas, palmeras, balos, jazmín silvestre, guaydiles, cardones y tabaibas. En total, se utilizaron 1.278 ejemplares de flora canaria.