TEA Tenerife Espacio de las Artes, centro dependiente del Cabildo insular, proyecta desde mañana [viernes 11] y hasta el domingo [día 13] la película japonesa Una pastelería en Tokio (An aka, 2015), de Naomi Kawase. La cinta, una historia llena de ternura sobre la soledad y la amistad que recuerda que nunca es tarde para cumplir un sueño, se pasará en versión original en japonés con subtítulos en español, en dos pases diarios que comenzarán a las 19,00 y a 21,30 horas.

Este filme, de 113 minutos de duración, inauguró la selección Un Certain Regard en el Festival de Cannes y se presentó en el Festival Internacional de Valladolid-Seminci. Una pastelería en Tokio está dirigida y escrita por Naomi Kawase (basada en la novela súper ventas de Durian Sukegawa) y protagonizada por Kirin Kiki, Miyoko Asada y Etsuko Ichihara. En ella se recoge la historia de Sentaro, el gerente de una pastelería en el centro de Tokio, se enfrenta a una simpática pero extraña anciana en busca de trabajo llamada Tokue.

Tokue se ofrece a ayudar a Santaro, ya que tiene una habilidad especial para hacer dorayakis (pastelitos rellenos de salsa de frijoles rojos dulces llamados an). Gracias a su receta secreta, el pequeño negocio comienza a prosperar. Con el tiempo iniciarán una relación basada en mucho más que la comida de la calle y no dudarán en abrir sus corazones y mostrar sus viejas heridas.

Naomi Kawase (Nara, Japón, 1969) es una directora de cine y escritora. Su obra gira en torno a la vida íntima, la búsqueda de los orígenes y de la identidad. En 1997 fue la cineasta más joven premiada de la historia del Festival de Cannes cuando ganó el Premio Cámara de Oro por su película Moe no Suzaku. Kawase creció y se crió con su tía abuela, después de haber sido abandonada por sus padres. Es precisamente su familia adoptiva la que protagoniza sus primeros trabajos. Licenciada en la Escuela de Fotografía de Osaka en 1989, trabajó en este centro como docente durante cuatro años.

Su cortometraje documental Abrazando el aire (1993) fue premiado en el Festival Image Forum de Japón. Tres años después estrenó un mediometraje documental Sol de atardecer. En 1997  escribió y dirigió Suzaku, su primer largometraje de ficción, al que siguió Hotaru (2000) y que se estrenó en la sección competitiva del Festival de Locarno, donde obtuvo el Premio Fipresci.

Su tercer largometraje, Shara (2003), fue seleccionado para la Sección Oficial de Cannes. En el año 2006 dirigió un documental sobre su propio embarazo y parto, Nacimiento y maternidad, y en 2007 compitió de nuevo en la Sección Oficial de la Semana con El bosque del luto, alzándose con el Gran Premio Especial del Jurado. Este trabajo sobre el dolor y el duelo está considerada su obra maestra. En 2010 presentó el documental Genpin en el que reflexiona sobre el parto natural, el placer y la muerte, con el que ganó el Premio de la Fipresci en el Festival de Cine de San Sebastián.