El Cabildo destina 900.000 euros a ayudas al sector apícola

El consejero de Sector Primario, Valentín González, presidió hoy (lunes 27) la Mesa Insular de la Apicultura, donde anunció líneas directas de subvención, con el objetivo de “paliar los graves efectos que el incendio del pasado verano tuvo para los apicultores”

El Cabildo de Tenerife destinará 900.000 euros a ayudas para el sector apícola, a través de distintas líneas de subvención, durante 2024.

El consejero de Sector Primario, Valentín González, presidió hoy (lunes 27) la Mesa Insular de la Apicultura, donde anunció a los apicultores estas medidas, que “tomamos con el objetivo de amparar a este subsector ganadero que sufrió gravemente las consecuencias del incendio del pasado verano en Tenerife, ya que un gran número de colmenas se encontraban dentro del calendario habitual de producción de miel en la trashumancia de El Teide en busca de mieles de cumbre (retama de El Teide y Malpica, fundamentalmente) y de castaño”.

Los colectivos que estuvieron presentes en esta edición de la Mesa Insular de la Apicultura fueron APITEN, ADS Abecan, APITEIDE, Apícola Canaria, FOAPI y Norte Tenerife.

González recordó que “el incendio afectó a medianías y zonas altas de la isla, dañando unas 3.500 colmenas y destruyendo una importante parte del hábitat de las abejas”. A esta circunstancia, “hay que sumarle las consecuencias de la sequía que padecemos”, lo que “hace necesaria una intervención de la administración para poner a disposición de los apicultores los recursos necesarios para mantener su actividad”.

Con esa finalidad, el área de Sector Primario dotará una línea de ayudas para la alimentación de las abejas, que asciende a 150.000 euros, mientras que pondrá en marcha otra subvención de resiliencia del sector apícola afectado por el incendio que, con un presupuesto total de 800.000 euros, persigue “compensar a los ganaderos por las pérdidas de producción que les ocasionó el incendio de 2023 y los efectos de la sequía”.

Valentín González señala que “tratamos de minimizar, en la medida de lo posible, los efectos del fuego y de la sequía en este importante subsector ganadero, que resulta fundamental para la sostenibilidad y la conservación de la biodiversidad de la isla”.