La película se podrá ver en este espacio desde mañana

[jueves 24] hasta el domingo [día 27], a las 12:15 y a las 18:00 horas

TEA Tenerife Espacio de las Artes, centro de arte contemporáneo que depende del Área de Cultura, Educación, Juventud y Deportes del Cabildo de Tenerife, que dirige la consejera Concepción Rivero, proyecta esta semana en El Videoclub -programa que propone una reflexión sobre el sentido de la imagen y el lenguaje cinematográfico- la película documental View of the city (1981), de Harun Farocki. El filme se podrá ver en este espacio de manera gratuita desde mañana [jueves 24] hasta el domingo [día 27], en dos pases diarios que darán comienzo a las 12:15 y a las 18:00 horas. La entrada a El Videoclub es gratuita pero el aforo del espacio está limitado a un máximo de diez personas, que además deberán hacer uso de mascarillas.

Esta proyección se enmarca dentro de un ciclo de películas vinculado a El sauce ve de cabeza la imagen de la garza, una exposición comisariada por Catalina Lozano que explora las construcciones del paisaje como imágenes naturalizadas y que se puede visitar en TEA Tenerife hasta el 4 de octubre. Estas proyecciones suponen una oportunidad única para ver estas películas -que se exponen en esta exposición- en formato de cine y de manera temporal.

En View of the city, Farocki comienza con el análisis de fotografías realizadas en el Berlín arrasado por los aliados en 1945, y que evocan las ruinas de las ciudades clásicas, para continuar luego un viaje de búsqueda por edificios del último cuarto del siglo XIX por el Berlín Occidental, que es a la vez una reflexión sobre la fotografía y la arquitectura, sobre lo nuevo y lo viejo. Y la oportunidad de crear una arquitectura nueva, para una sociedad nueva. Lo mismo que pedían los jóvenes cineastas alemanes, firmantes del Manifiesto de Oberhausen, del que Farocki fue uno de los firmantes, y que daría lugar al llamado Nuevo Cine Alemán.

Nacido en 1944 de padre hindú y madre alemana, Harun Farocki pasó su infancia entre India e Indonesia, y con 14 años su familia se trasladaría definitivamente a Hamburgo. En 1962, Farocki se mudó a Berlín donde acabaría estudiando en la Academia Alemana de Cine y Televisión, de donde fue expulsado junto a otros alumnos, por realizar actividades políticas subversivas. A lo largo de su dilatada y prolífica carrera, la producción audiovisual de Farocki, se caracteriza por su carga sociopolítica. Ensayos fílmicos en los que estética y política se entremezclan, en una constante reflexión sobre el sentido de la imagen.