TEA Tenerife Espacio de las Artes ha seleccionado los proyectos de las creadoras Itsaso Otero (Altitud cero), Romina Rivero (El espíritu no es un hueso) y Franzisca Siegrist (Encajada) y el de las investigadoras Dalia de la Rosa y Lola Barrena ([pre]Posiciones) para sus programas de residencias artísticas y de investigación. Estas nuevas residencias han sido creadas para apoyar a artistas e investigadores canarios o residentes en la Isla fomentando la producción de sus obras y la investigación inherente al proceso de creación, así como para estimular la investigación artística y multidisciplinar y crear un tejido activo, crítico y de conocimiento del arte actual. KLas residencias se llevarán a cabo entre mayo y septiembre de este mismo año.

La concesión de estas residencias se ha producido en régimen de concurrencia competitiva, de acuerdo con los principios de objetividad, transparencia, igualdad y no discriminación. De este modo, el centro de arte contemporáneo del Cabildo volvió a apostar por el método de la convocatoria pública como instrumento de selección y por la participación de jurados colegiados. En esta ocasión, la Comisión de Valoración encargada de resolver estas tres convocatorias de residencias de TEA estuvo integrada por la artista Amparo Sard; por el director del Centro de Arte La Regenta, Alejandro Vitaubet; por la creadora y co-directora de Beta-Local de Puerto Rico, Sofía Gallisá; por el conservador de la Colección de TEA, Isidro Hernández; por la conservadora de TEA, Yolanda Peralta; y por el gerente de TEA, Jerónimo Cabrera.

Con estas iniciativas, TEA continúa con sus líneas de actuaciones destinadas a apoyar a los creadores e investigadores canarios. Los objetivos de estos programas se enmarcan dentro de la estrategia Tenerife 2030 del Cabildo, que trabaja para mejorar las capacidades y las oportunidades de los ciudadanos de la Isla a través de una mejor formación y donde la creatividad y la cultura juegan un papel fundamental.

Itsaso Otero (Pamplona, 1988) llevará a cabo una residencia de estancia artística en Beta-Local en San Juan (Puerto Rico), que logró gracias a su proyecto Altitud cero, en el que plantea un acercamiento al paisaje urbano de San Juan y su bahía. En su trabajo, Otero atiende a cómo ha cambiado el paisaje urbano, entendido este también como las zonas del mar, aledañas a la bahía, la costa y el puerto. Este proyecto pretende ser una investigación del espacio, de los alrededores de la bahía y ver cómo ha ido cambiando formalmente a lo largo del tiempo, cómo el paisaje ha sido modificado artificialmente.

Esta residencia, que se realiza con la colaboración de la Beta-Local, le permitirá a Itsaso Otero beneficiarse no solo de nuevos contextos artísticos para ampliar su trayectoria y realizar sus creaciones, sino también de establecer redes de colaboración con otros agentes culturales. De esta manera, visibilizará y difundirá su obra y el proceso de realización de la misma, pero también se formará y se nutrirá con el intercambio de experiencias.

El espíritu no es un hueso, de Romina Rivero (Tenerife, 1982), es un proyecto que consta de una pieza instalativa que se presenta como obra inédita y que está formada por una serie de objetos seriados, vértebras humanas con acabado cromado en plata. La pieza consiste en una intervención formal-estética sobre una serie de objetos cotidianos. La narrativa visual de este proyecto se cimienta y articula en torno a la investigación de una relación de conceptos específicos: poder, resistencia, creación, vida y libertad; pues donde habitan las relaciones de poder, habita el poder y existe, por ende, la resistencia.

Franzisca Siegrist (Suiza, 1984) llevará a cabo un proyecto titulado Encajada, que presenta dos objetivos, uno conceptual y uno formal y tiene carácter de investigación y de producción. Este trabajo se focalizará en su conexión con Canarias, el sentimiento del hogar y el querer encajar, adaptarse, en una búsqueda constante del sentimiento de pertenencia. Los seres humanos, en muchas ocasiones, ya no tienen solo una identidad. Esta es la idea central sobre la que vertebra este proyecto. Durante su estancia en TEA la artista producirá una obra acumulativa, que partirá de una performance/instalación y que concluirá en una nueva serie de fotografías.

Dalia Hernández de la Rosa (Tenerife, 1983) firma junto a Lola Barrena (Tenerife, 1977) [pre]Posiciones, propuesta de investigación con la que han sido seleccionadas para la residencia de investigación en torno a la Colección de TEA. Las historiadoras del Arte presentan un proyecto cuyo interés reside en el estudio y extracción de nuevos paradigmas simbólicos asociados y conectados con los procesos de pensamiento actual. En un movimiento giratorio, la colección pasará a ser diseccionada desde la frontalidad hacia un lugar indeterminado entre su parte trasera y sus entornos de relación. Es decir, que incorporarán otras formas adyacentes y fronterizas que permitan mostrar artificios, hasta ahora, ajenos a la Colección de TEA.