La Reserva de la Biosfera de Anaga tendrá por primera vez un plan de acción, que se basa en la participación ciudadana
La consejera de Gestión del Medio Natural y Seguridad, Isabel García, señaló que con este documento “se pretende poner en marcha a principios del año que viene acciones concretas, viables y dotadas de presupuesto, y consensuadas con las personas implicadas en la reserva”
Además, se ha firmado un convenio con el Ayuntamiento de Tegueste para la cesión de un espacio de trabajo en el Centro de Educación Medioambiental del Parque Rural de Anaga en Pedro Álvarez que acogerá la oficina de la Reserva
La Reserva de la Biosfera de Anaga ha celebrado hoy su consejo general en la sede del área de Gestión del Medio Natural y Seguridad del Cabildo y de forma telemática, en el que participaron representantes de las municipios con titularidad en el territorio de este espacio natural protegido, además de representantes del Gobierno de Canarias, asociaciones vecinales, de las cofradías de pescadores, empresarios y empresarias, y de la presidenta del consejo, y consejera de Gestión del Medio Natural y seguridad del Cabildo, Isabel García.
“En esta reunión hemos tratado el avance del Plan de Acción de la Reserva, un documento imprescindible en la estrategia de este importante espacio natural y que ha sido diseñado en base a las propuestas e intervenciones de la ciudadanía”, ha indicado la consejera del área. Además, indicó la consejera “se ha materializado ya con el ayuntamiento de Tegueste la cesión de un espacio en el Centro de Educación Medioambiental del Parque Rural de Anaga en Pedro Álvarez que acogerá la oficina de la Reserva”,
“En el proceso de elaboración de este plan de acción se han realizado entrevistas a agentes clave, talleres reuniones con las corporaciones municipales y técnicas, como por ejemplo con Balten, área de Movilidad, programa Barrios por el empleo, además de otros talleres específicos sobre los usos del territorio, medio marino, entidades de voluntariado e incluso reuniones con medio centenar de vecinos y vecinas del macizo”, señaló Isabel García.
Con toda esta información, la oficina de gestión de la Reserva, ha trazo un documento que proponga una gestión adaptativa que incluya acciones concretas y no “se formule de un montón de iniciativas que llenen un expediente sin razón de ser y que finalmente no se ejecuten por falta de presupuesto o incluso por criterios de viabilidad”, apuntó García, y por lo tanto aquellas que incluya el plan “deberán estar claramente temporalizadas y asociadas a dotaciones económicas concretas”.
Entre las acciones que complementarán este plan, según se ha avanzado en la reunión, se tendrán en cuenta como prioritarias las relacionadas con el desarrollo sostenible, el autoabastecimiento energético y alimentario, la economía circular, la cercanía de los servicios públicos y la empleabilidad local, además de las relacionadas con la mitigación del cambio climático, y por supuesto que todas ellas cumplan con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Unesco.
A partir de ahora, y una vez presentado este avance, se hará un seguimiento del mismo por las administraciones implicadas en la Reserva para luego en el Consejo General validarlo y ponerlo en marcha.