El presidente del Cabildo, Carlos Alonso, junto al consejero insular de Turismo, Alberto Bernabé, se desplazaron hoy [viernes 4] a la ciudad turística de Puerto de la Cruz para comprobar junto a la alcaldesa accidental, Sandra Rodríguez, y el concejal de Urbanismo, Juan Carlos Marrero, el resultado final de los trabajos de una de las arterias principales del municipio como es la calle Quintana.

Esta actuación, que ha supuesto una inversión que ha superado el millón de euros, permitirá recuperar esta importante vía como un eje clave de la zona turística y comercial del centro urbano de la ciudad.

Carlos Alonso señaló que la mejora de la calle Quintana no solo revalorizará el entorno y revitalizará los comercios de la zona sino, además, a todo el Puerto de la Cruz porque se trata de una actuación estratégica que tiene un importante componente turístico en línea con el posicionamiento que queremos para la ciudad.

El presidente destacó la “apuesta firme” que desde el Cabildo se está llevando a cabo por esta ciudad en colaboración con el Consorcio de Rehabilitación y el Ayuntamiento “con el objetivo de que el Puerto de la Cruz consolide las cifras turísticas de los últimos años, y no solo con el proceso de rehabilitación desde lo público sino también desde lo privado”. Alonso volvió a pedir mayor implicación por parte del sector comercial como lo ha hecho el sector de la restauración y el del ocio y la cultura.

El Cabildo continuará trabajando en otros proyectos de la ciudad turística, al igual que lo ha hecho con el paseo San Telmo, o la calle La Hoya, aseguró el presidente insular durante la visita donde adelantó que la mejora de la Plaza del Charco se encuentra en la fase previa de desarrollo del proyecto.

La alcaldesa accidental, Sandra Rodríguez, reconoció la labor realizada por el área de Urbanismo, al frente de la cual se encuentra Juan Carlos Marrero, “que ha desempeñado un seguimiento continuo de las obras” y agradeció la implicación permanente del presidente del Cabildo. Asimismo, se sumó a la petición de Carlos Alonso para que los comerciantes colaboren “en beneficio de la ciudad y del propio sector, lo que permita posicionar al Puerto aun más”. Rodríguez recordó que se trata de un “destino diferente, un destino urbano, donde conviven ciudadanos y turistas”.

La obra de la calle Quintana sufrió algún retraso en su ejecución debido a algunos imprevistos surgidos en cuanto al saneamiento, drenaje de pluviales, abastecimiento de agua potable e instalaciones de medio y baja tensión y de alumbrado público, además de todo tipo de necesidades, que ha permitido que al margen del cambio estético que ha experimentado, se haya actuado internamente para no tener que volver a actuar en los próximos años.

El proyecto, financiado por el Cabildo y el Ayuntamiento se enmarca dentro del Plan Director para la Zona Comercial Abierta del Puerto de la Cruz así como del Plan Estratégico para la Mejora del Espacio Público que incluye actuaciones en los municipios de Adeje, Arona, Santiago del Teide y Puerto de la Cruz con un presupuesto de 10 millones de euros a financiar entre el Cabildo y los citados municipios.

La actuación de la calle Quintana ha tenido como objetivo principal su recuperación y embellecimiento para adecuarla a los criterios de calidad de la zona turística y potenciarla como vía peatonal de la zona comercial abierta. Se han utilizado los mismos criterios que los adoptados en otras intervenciones similares realizadas ya, por ejemplo, en la calle de la Hoya o en el mismo paseo de San Telmo y, además, se ha mejorado la conexión con la plaza de la Iglesia y el encuentro con la plaza del Charco. De esta forma se consigue la homogenización estética y funcional como un único paseo que convertida en arteria comercial principal del municipio, de gran atractivo turístico.

La calle Quintana se encuentra situada en el conjunto histórico del Puerto de la Cruz. Se trata de una vía peatonal desde hace más de dos décadas que posee las condiciones de localización y uso necesarias para reforzar su centralidad y destacar como eje vertebral que conecta algunos de los espacios urbanos de mayor atractivo del casco histórico, como pueden ser la plaza de la Iglesia Nuestra Señora de la Peña de Francia, la plazoleta del doctor Víctor Pérez y la plaza del Charco.

La actuación realizada, que abarca una superficie de 3.216 metros cuadrados, ha incluido la remodelación del pavimento, nueva vegetación, alumbrado e instalaciones, entre otras mejoras. Al estar incluida en el ámbito de actuación en un bien de Interés Cultural (BIC), la intervención ha tendido a la recuperación de los valores históricos de la zona, eliminando en lo posible todos aquellos elementos que distorsionan su configuración original y empleando materiales de calidad que perduren en el tiempo.

El proyecto ha contemplado también la eliminación de todos los elementos añadidos que sobresalen del plano de la calzada, repavimentación de la calle con piedra natural, sustitución del mobiliario urbano, nuevos alcorques y jardineras y renovación de las especies vegetales.

Respecto a las infraestructuras, se ha dotado a la calle de nueva red de saneamiento, drenaje de pluviales, abastecimiento de agua potable e instalaciones de medio y baja tensión y de alumbrado público. Además de la instalación de la red de fibra óptica y red general de alumbrado para las fiestas.