La consejera de Museos de la Corporación insular, Amaya Conde, recibió, recientemente, de la mano del director de la Fundación ‘Centro Internacional para la Conservación del Patrimonio’, Cicop, Miguel Ángel Fernández, un reloj de fichaje del personal del antiguo tranvía de la Isla que ha sido objeto de restauración. Se trata de un ejemplar que ha formado parte de las colecciones del Museo de Historia y Antropología de Tenerife desde que abriera sus puertas, y anteriormente pertenecía a los fondos históricos del Cabildo.

Para Amaya Conde, volver a disponer de este reloj “es fruto de la colaboración entre las dos entidades a través de un convenio. Ambas perseguimos lo mismo: que la sociedad de Tenerife y sus visitantes puedan conocer un poco más de la historia de la Isla a través de objetos tan singulares como puede ser un reloj de fichaje como este”.

La consejera insular señala que una vez concluida su restauración y presentación, el Museo lo incorporará a la exposición permanente en su sede de la Casa Lercaro. De igual modo, la Unidad de Relojes Históricos del Cicop ha mostrado interés por otros relojes de la colección de este recinto, “lo que puede significar una larga y fructífera colaboración entre ambas instituciones”, ha dicho.

Los trabajos de restauración que se han llevado a cabo desde la Unidad de Relojes Históricos del Cicop, han corrido a cargo de Avelino Moreno, quien ha actuado sobre la maquinaria (grupo electromecánico de marcha y grupo mecánico de impresión), así como sobre la esfera y el mueble que los sustenta. Se trata de un ejemplar del fabricante National Time Record Company Ltd, en el Reino Unido, en el año 1930, y distribuido por la Horlogerie Controle Electricite, de Bruselas.

El reloj restaurado recogía el horario de la jornada realizada por los trabajadores del antiguo tranvía y  pertenece a la categoría de los que van conectados a un sistema múltiple donde un reloj maestro proporciona la misma hora al resto (relojes secundarios o esclavos), que se mueven al recibir los impulsos eléctricos del primer reloj.

La maquinaria de este ejemplar está contenida en una caja de madera de roble, diseñada para poder ser apoyada en un soporte e instalarlo en la pared. En la parte frontal se cierra con cristal inserto en marco de madera con cerradura a través de la cual se accede a la esfera; esta puerta, en su parte inferior, poseía una cubierta de metal donde se situaba la boca de entrada de las fichas y justo debajo el mecanismo para seleccionar la hora de entrada y salida del turno de mañana y tarde, así como el manipulador de impresión de la ficha, registrando en cada una de las fichas personales, tales datos.