A través del programa Nuevas Oportunidades de Empleo (NOE), siete personas trabajan en el análisis de estas infraestructuras verdes para precisar su papel como fuente de recursos científicos, culturales, educativos o turísticos

Bajo la dirección técnica y supervisión del Área de Planificación del Territorio, Patrimonio Histórico y Turismo del Cabildo Insular de Tenerife, que dirige el consejero José Gregorio Martín Plata, con el apoyo del Área de Gestión del Medio Natural y Seguridad, al frente de la cual se encuentra Isabel García Hernández, se ejecuta actualmente el proyecto “La Red de Corredores Ecológicos de Tenerife como fuente de recursos” y en ella participan siete personas que han sido incorporadas a través del Programa NOE (Nuevas Oportunidades de Empleo).

Este proyecto realiza un trabajo de redefinición de los 152 corredores resultantes del estudio preliminar de 2017, que se diseñaron a una escala insular, aplicando para ello una escala con más detalle y adaptada a la realidad territorial. Para determinar los corredores, se seleccionaron previamente nueve especies vegetales y seis especies animales representativas de esos ecosistemas, a las que les “costaría menos” desplazarse o dispersarse por los corredores para realizar su ciclo vital y garantizar así su supervivencia. Posteriormente, se valorarán sus características y su papel como fuente de recursos científicos, culturales, educativos o turísticos que puedan ser aprovechados. Los corredores ecológicos, una vez desarrollados, serán integrados como parte del contenido de Plan de Ordenación de los Recursos Naturales del Plan insular de Ordenación de Tenerife, siendo uno de los trabajos más importantes que se han llevado a cabo desde el área de Planificación del Territorio, Turismo y Patrimonio Histórico.

Los corredores ecológicos son superficies del territorio que conectan determinados espacios entre sí para el intercambio de las especies animales y vegetales que viven en ellos, creándose así una red que garantiza la riqueza y supervivencia de esos espacios, es decir, su biodiversidad. La forma de los corredores es generalmente lineal y continua, y en la isla tienen especial importancia los barrancos, los caminos reales y las coladas volcánicas. Sin embargo, en los casos en los que el territorio se encuentra excesivamente fragmentado a causa de las actividades humanas, el corredor es discontinuo y está compuesto por una serie de áreas (parches) que enlazan entre sí.

Con el trabajo actual  se pretende afinar el trazado de los corredores del estudio original, definiéndolos con detalle de modo que los recorridos marcados originalmente pueden sufrir alteraciones para evitar zonas antropizadas o fragmentadas por carreteras y vías de comunicación, o incluso se están desechando algunos por no considerarse funcionales. Se pretende, en definitiva, establecer una red coherente que preserve la biodiversidad insular y beneficie a la sociedad. El personal del Programa NOE que colabora en el proyecto está formado por dos equipos multidisciplinares repartidos en las dos Áreas, uno de tres componentes en el Área de Planificación del Territorio, Patrimonio Histórico y otro de cuatro componentes en el Área de Gestión del Medio Natural y Seguridad.

Este proyecto desarrolla un estudio preliminar encargado por el Cabildo Insular en 2017 que definió y localizó los corredores ecológicos de Tenerife en cumplimiento del mandato de la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, que obliga a las Administraciones a mejorar la conectividad ecológica del territorio, sobre todo entre los espacios protegidos de la Red Natura 2000 y los espacios naturales relevantes para la biodiversidad –entre los que se incluyen los de la Red Canaria–, para asegurar su funcionalidad y dar coherencia a todo el sistema insular.

La contratación del personal relacionado con este tipo de tareas se realizó a finales de 2019 y fueron seleccionados 33 desempleados, entre los que se encuentran los componentes de los dos equipos multidisciplinares, por un coste total de 843.881,92 €, solicitándose al Servicio Canario de Empleo la cantidad de 588.514,60 € y aportando el resto la Corporación.