El vicepresidente primero y consejero insular de Carreteras, Enrique Arriaga, lamenta el anuncio del Ayuntamiento de Los Realejos de judicializar una cuestión “que podemos resolver con entendimiento y colaboración institucional, tal y como venimos haciendo en muchos otros municipios, y que no hará sino retrasar la solución al problema y perjudicar a los vecinos

El consejero insular de Carreteras, Enrique Arriaga, recuerda al Ayuntamiento de Los Realejos que “la solución provisional para abrir el carril actualmente cerrado de la carretera insular TF-333 en Los Realejos debe, como no puede ser de otra manera, cumplir con la Ley de Carreteras, que establece un espacio mínimo de dominio público de 3 metros”. 

Arriaga señala que “el consistorio plantea una propuesta verbal que no se ajusta a la legalidad” y asegura que “no se ha hecho llegar a la corporación insular formalmente la solución técnica que permita abrir el carril”.

El consejero insiste en que la prioridad del Cabildo en este caso es restaurar el tráfico en la carretera insular lo antes posible y terminar con las  molestias que están sufriendo los usuarios de la vía, pero siempre cumpliendo las normas establecidas. Prueba de ello es que este mismo domingo por la noche, en total coordinación con el promotor y propietario del muro, se va a proceder a la limpieza y retirada de los restos del derrumbe con el fin de minimizar la posibilidad de escorrentías de material a la vía en el caso de que se produzcan lluvias”.

Enrique Arriaga lamenta el anuncio del Ayuntamiento de Los Realejos de que judicializará una cuestión “que podemos resolver con entendimiento y colaboración institucional, tal y como venimos haciendo en muchos otros municipios, y que no hará sino retrasar la solución al problema y perjudicar a los vecinos”. 

El consejero recuerda que la solución propuesta por el área insular de Carreteras resuelve un problema histórico de movilidad entre el barrio de La Montaña y el colegio Pureza de María, una demanda de los vecinos durante décadas. Esta solución consiste en la construcción de un muro de contención que respete la distancia establecida en la normativa. 

A su vez, esta actuación solventaría el informe desfavorable emitido desde la corporación municipal al proyecto de glorieta en la intersección con el Camino de La Luz planteado por el Cabildo de Tenerife.