El Cabildo de Tenerife presentó hoy [viernes 31] el nuevo Espacio MiniTEA, un lugar que TEA Tenerife Espacio de las Artes ha creado para que los niños y las niñas acompañados de sus familias puedan desarrollar su creatividad en su tiempo de ocio a través de diferentes herramientas de creación plástica. El presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso; el director insular de Cultura y Educación, José Luis Rivero; y la responsable del departamento de Educación de TEA, Paloma Tudela; fueron los encargados de descubrir este nuevo MiniTEA que, dos años después de su nacimiento, se hace grande, se transforma y crece, tanto en superficie como en el número de actividades programadas.
Acompañado ya de los primeros visitantes de este recién estrenado MiniTEA, el presidente del Cabildo, Carlos Alonso, señaló que este nuevo gran espacio “encaja en la filosofía de Tenerife 2030, una iniciativa de la Corporación insular que pretende formar y capacitar a los más jóvenes para que estén preparados y puedan hacer frente a los retos del futuro”. En esta línea MiniTEA incorpora actividades que fomentan la creatividad de los más pequeños y potencia su talento. Alonso indicó que, aunque se ha quitado parte al museo como tal, TEA Tenerife Espacio de las Artes “no pierde sino que gana en espacio. MiniTEA es ahora un contrapeso”, en el sentido de que se equilibra la oferta para toda la familia.
José Luis Rivero, también incidió en que este nuevo espacio que crece da un nuevo ímpetu a Tenerife 2030 que necesita materia prima para desarrollar el talento y la creatividad. MiniTEA es la herramienta que lo hace posible. “Es un encuentro permanente con el arte, donde los niños y niñas pueden vivir el arte como algo cercano”, añadió. Rivero señaló que MiniTEA es un espacio único en España, “ningún otro museo o centro de arte tiene un lugar así y menos dentro del mismo espacio expositivo”.
La responsable del departamento de Educación de TEA, Paloma Tudela, destacó la implicación de todo el equipo y destacó las posibilidades que se brindan para desarrollar la creatividad. En este sentido, explicó que de los tres espacios que conforman MiniTEA hay una sala de creación libre con herramientas para que los pequeños puedan crear sin ningún plan ni sugerencia.
El nuevo MiniTEA -proyecto que se enmarca dentro de la Estrategia Tenerife 2030, con la que la Corporación insular pretende mejorar la capacitación de los jóvenes- triplica el número de metros cuadrados de los que disponía hasta la fecha, pasando de 60 a 180 metros cuadros. Esta ampliación también implica un aumento de las actividades generadas desde este espacio, que desde su apertura en marzo de 2015 ha recibido un total de 8.319 visitas (4.348 niños y 3.971 adultos) y que ha desarrollado una decena de programas vinculados a otras tantas obras de arte de la Colección de TEA.
Si ya hace dos años, al posibilitar un espacio educativo abierto de manera permanente TEA ya dejó entrever su apuesta por la educación como una de sus funciones primordiales, con esta ampliación, este centro de arte contemporáneo del Cabildo consolida su compromiso con la educación, la formación de la ciudadanía y la integración y comunicación con sus públicos. También con la difusión del arte contemporáneo y de su lenguaje.
Presentación de Mini TEA
La ubicación del MiniTEA dentro del propio espacio expositivo supone además darle forma y ponerle cara a ese lugar para, por y desde lo educativo. En este sentido, TEA se posiciona como un centro pionero al priorizar y visibilizar su programa educativo con el objeto no solo de difundirlo sino de materializarlo en un lugar real en el que las familias, pero también los profesores, docentes, educadores y demás personas interesadas encuentren un espacio de reunión, creatividad y debate donde contribuir a la construcción de una sociedad más abierta e inclusiva y, por lo tanto, mejor y más justa.
El Espacio MiniTEA es de entrada libre y está abierto de martes a domingo de 10:00 a 20:00 horas. Su programación se renovará cada tres meses y esta primera (que se desarrollará hasta junio) está dedicada a la ciudad. En su nueva ubicación, el Espacio MiniTEA contará con tres salas diferenciadas pero vinculadas entre sí, en las que los niños a partir de 5 años podrán desarrollar su creatividad a través de la creación plástica.
La primera de las salas acoge diferentes obras de arte a modo de Miniexposiciones o exposiciones de pequeño formato, en las que no habrá más de tres o cuatro obras y que determinarán las actividades y propuestas plásticas que se podrán desarrollar en las otras dos estancias. Esta distribución permite exponer obras originales (en lugar de reproducciones, como se venía haciendo hasta ahora), y diversificar la naturaleza de las actividades. Además, posibilita un aforo mucho mayor tanto de niños como de adultos. Cabe destacar que en este primer ámbito las propuestas se dirigirán también al público adulto, que podrá ser partícipe y profundizar en los temas de las obras según sus intereses e inquietudes.
En esta sala niños, adolescentes y adultos pueden colaborar y trabajar juntos viendo la MiniExpo y participando en las actividades. También pueden consultar bibliografía sobre el tema de la exposición, para descubrir cómo éste es abordado por otros creadores y desde diferentes disciplinas. Las obras que conforman esta primera mini exposición son: Calle de Montillo (Castello, Venecia, 1990), de Thomas Struth; Beirut (1991), de Gabriele Basilico; y The Invisible City (2005), de la serie Netropoli de Michael Najjar.
Presentación de Mini TEA
El segundo de los espacios será el que funcione a modo de Taller de artista, preparado para que los niños puedan llevar a cabo de manera más libre y experimental actividades de creación plástica. Esta sala está reservada para que niños y adolescentes experimenten libremente con materiales y herramientas plásticas. Es un espacio de creación libre cuyo fin es proporcionarles un entorno donde desarrollar su creatividad
Finalmente, el tercero de los espacios será el que acoja el tipo de propuestas que viene siendo habitual en MiniTEA, a través de las que se abordan las obras de arte a diferentes niveles, tanto en relación a su temática como desde un punto de vista formal. Juan Hidalgo, Antón Patiño, Óscar Domínguez, Vik Muniz o Ángel Padrón son algunos de los artistas con cuyas obras se ha trabajo en este espacio. En esta ocasión se trabaja sobre el tema de la ciudad en base a las tres obras que conforman la MiniExpo. Las actividades de esta sala tienen como objetivo que los niños, mediante actividades creativas, se familiaricen con las obras y el lenguaje del arte contemporáneo.
El espacio MiniTEA es un ejemplo de innovación en el ámbito de la educación, al proporcionar a los niños un lugar para que puedan desarrollar, a través de herramientas de creación plástica, toda su creatividad. Es también un ejemplo de como las nuevas estrategias educativas -que plantean la necesidad de renovar determinados principios pedagógicos- pueden implementarse y redundar en resultados beneficiosos no sólo para los propios niños sino para toda la comunidad.
A su vez se trata de una apuesta clara por el desarrollo de la creatividad, una herramienta fundamental para la formación de individuos autónomos, libres y críticos, sea cual fuere el ámbito en que esa creatividad cultivada en la infancia luego se desarrolle y aplique durante la edad adulta. Es un lugar inclusivo, en el que niños de diferente nivel social y con diferentes recursos pueden relacionarse y, lo que es más importante, interactuar, compartir y colaborar en la producción de proyectos comunes. El MiniTEA es una demostración de la importancia que una institución museística pública otorga a su función educativa, proporcionando los medios humanos, materiales y estructurales necesarios para que pueda desarrollarse de manera óptima.
En él se utiliza una metodología participativa, que prima sobre todas las cosas la autonomía y libertad de los usuarios del espacio, los cuales pueden elegir en qué medida supeditarse a las propuestas plásticas, siendo libres para seguirlas pero también para darles la vuelta y reformularlas según sus propios intereses. La metodología es, además colaborativa, pues promueve la creación entre niños y adultos y fomenta que éstos últimos adopten un papel activo en este tiempo de ocio cultural compartido.