El Cabildo y el Obispado de Tenerife presentaron ayer [domingo 18] las obras de restauración de la iglesia Nuestra Señora de la Luz de Guía de Isora, unos trabajos que han contado con una inversión de 91.372 euros. El presidente insular, Carlos Alonso, y el obispo de la Diócesis, Bernardo Álvarez, participaron en un acto con los vecinos en el marco de las fiestas patronales acompañados por la consejera insular de Patrimonio, Josefa Mesa; el alcalde del municipio, Pedro Martín, y otras autoridades regionales, insulares y locales.

Alonso explica que las obras realizadas en el inmueble, declarado Bien de Interés Cultural con la categoría de conjunto histórico, “han consistido fundamentalmente en la remodelación del campanario, que presentaba un gran deterioro, y en el acondicionamiento de la escalera y otros elementos pero siempre respetando las características y materiales de la iglesia”.

Por su parte, el obispo ha manifestado que “los trabajos han quedado muy bien y me gustaría agradecer al Cabildo, una vez más, su colaboración y compromiso en la restauración del patrimonio religioso”, ha indicado el prelado. Además, el obispo destacó el esfuerzo que realiza  la parroquia, “aportando también su granito de arena económico para poder llegar hasta la partida presupuestaria necesaria para ejecutar las obras”.

La intervención también ha incluido la sustitución de la escalera que conduce al coro y al campanario y la que comunica con el reloj de la torre para mejorar la seguridad, la comodidad y la estética. Además, se han reparado los elementos de madera y el revestimiento de la torre con materiales de las mismas características que los existentes.

La consejera Josefa Mesa explica que esta actuación se enmarca dentro del convenio de colaboración que mantiene el Cabildo con el Obispado de Tenerife en materia de restauración de bienes inmuebles de titularidad eclesiástica, que supone una inversión global para este año de 589.000 euros para financiar un total de seis actuaciones.

Datos históricos

La iglesia se levanta en torno a la plaza de la Iglesia Nuestra Señora de La Luz, reedificada a principios de siglo sobre un inmueble anterior, cuyos orígenes se remontan a los primeros años del siglo XVII. En 1901 se realizan obras de reedificación que dan como resultado la actual iglesia de tres naves –una central y dos laterales- altar y sacristía.

El recinto religioso posee una entreplanta donde se sitúa el coro, al que se accede a través de una escalera curva de madera desde la que se puede acceder a la planta del campanario a través de una escalera de madera que comunica también con las cubiertas o el reloj de la torre.