La Federación Tinerfeña de Fútbol y el Cabildo de Tenerife ha presentado recientemente su Código Ético con el objetivo de fomentar el juego limpio en el fútbol insular. Este documento, que tiene carácter de manual, ha sido creado a través del Proyecto Buen Rollito y cuenta con la colaboración de la Corporación insular a través del programa “Tenerife Juega Limpio”. El Código Ético de la FTF es el primero que realiza una federación territorial y viene a complementar el publicado por la Real Federación Española de Fútbol el pasado mes de febrero.
El acto contó con la presencia del vicepresidente de la FTF, Francisco Rivera, la consejera de Deportes, Cristo Pérez, y el psicólogo y coordinador general técnico del proyecto Buen Rollito, Miguel Tomé. Rivera hizo hincapié en la buena predisposición que ha mostrado tanto la entidad federativa como el Cabildo para apoyar esta iniciativa. Además, añadió: “Esto no es un libro para tener en una estantería, sino en la mano siempre. Confío en que cree inquietud entre los clubes y estos se responsabilicen”. Por su parte, Cristo Pérez, indicó que “es un día importante para el deporte de Tenerife. El proyecto nació como una ilusión y ahora Buen Rollito es un referente en Canaria e incluso muchas personas fuera de las islas también se han interesado en él. Cuando lo tienes en la mano parece algo sencillo de escribir. Pero no solo se trata de páginas impresas porque detrás hay mucho trabajo, que ha sido consensuado con todas las partes, y una filosofía deportiva”. Miguel Tomé especificó que no se trata de un documento sancionador. “Cumplir con la guía es un compromiso personal que debe nacer desde la responsabilidad. Va con la ética de cada uno”, dijo.
El Código Ético de la Federación Tinerfeña de Fútbol cuenta con la particularidad de que se trata de un documento con un marcado carácter práctico, que ha sido creado y consensuado a través del trabajo directo con todos los agentes implicados en el fútbol base y se plantea con la aspiración de que se convierta en una referencia para los clubes deportivos a los que se anima a crear sus propios proyectos educativos.
Los ejemplares se harán llegar a los clubes de la isla (directivos, entrenadores, jugadores/as, padres y madres), comités de la Federación, instituciones públicas y privadas relacionadas directamente con el fútbol base y medios de comunicación. Su reparto servirá para incrementar el número de participantes en el Proyecto Buen Rollito.
Elaboración del Código
El trabajo del proyecto se ha encaminado a sacar a la luz la realidad concreta del fútbol base para evaluar las conductas negativas y crear líneas de actuación que fomenten su prevención y corrección. Pero también a identificar las positivas y fomentar su promoción partiendo de la idea de que “nuestros campos de fútbol son espacios de vida y convivencia” como se destaca en la portada. Para ello reunió a todos los agentes implicados (jugadores/as, entrenadores/as, directivos/as, padres, madres, tutores, familiares, árbitros e instituciones). Así, uno de los principales valores del Código es que se trata de un documento consensuado con todas las partes.
El Código Ético tiene 73 páginas y se ha dividido en tres partes. La primera dedicada a las presentaciones, la segunda explica a través de siete puntos la filosofía, el sistema de trabajo y los objetivos del proyecto detallando cómo se han desarrollado hasta ahora y cuáles son las líneas de actuación en el futuro.
La tercera, denominada “¡Suerte! Guía de actuación Buen Rollito” es el resultado del trabajo de campo realizado con los clubes. El título está acompañado por el lema: “En la grada no nos gusta que se hagan tonterías ni se digan bobería”. Una sentencia que surgió espontáneamente de los jugadores/as de las Selecciones Tinerfeñas Sub 12 en una de las sesiones de trabajo del Comité de Fútbol 7. Con ella se pretende, ante todo, resaltar el carácter participativo del proyecto plasmado también en el slogan “Todos Aprendemos, Todos Educamos”.
Cuenta con una serie de tablas en las que se especifican las conductas a corregir que más repiten los jugadores, entrenadores, árbitros y espectadores, las ideas correctivas que inspiran el cambio y las conductas concretas a realizar para erradicarlas. Se introducen utilizando los hashtag que se han promocionado a través de las cuentas de Twitter (@BuenRollitoBase) y Facebook (Buen Rollito 3.0) del proyecto (#NosPreocupa, #EspírituBuenRollito y #ConductaBuenRollito), con el objetivo de promocionarlas indirectamente como un foro de participación y desarrollo del proyecto.